viernes, 10 de octubre de 2008

Sobre La dignidad e Igualdad de las lenguas, crítica de la discriminación lingüística




No he leído últimamente con mayor placer un libro de lingüística, de algún lingüista, de lenguaje, de algún estudioso del lenguaje, o de algo relacionado con la ciencia que lo estudia que este último: La dignidad e Igualdad de las lenguas, crítica de la discriminación lingüística; escrito, comentado, analizado, desgajado, deliciosa y minuciosamente explicado por el lingüista español Juan Carlos Moreno Cabrera, catedrático de Lingüística General en la Universidad Autónoma de Madrid.

Basado en el presupuesto de que "a una única especie humana le corresponde una única especie lingüística", Moreno Cabrera hace hincapié en el igualitarismo lingüístico de las lenguas, dado que aunque
"las lenguas del mundo son muy diferentes en su apariencia...la moderna lingüística ha ido mostrando cómo, debajo de esa aparentemente indomeñable diversidad, se esconden los mismos principios básicos, los mismos procesos estructurales, los mismos objetivos comunicativos, expresivos o imperativos"
(JCMC:2000:13).

Ciertamente,
los idiomas los hace el pueblo
, por ello Moreno en base a citas que hacen referencia a mitos, prejuicios y demás argumentos subjetivos, y hasta científicos pero interesadamente manipulados, va deshaciendo cada uno de esos antivalores que menosprecian la diversidad lingüística del mundo, con fines meramente económicos, políticos, sociales, etc.
Tal es el caso de las lenguas nacionales, lenguas mayores, lenguas universales, que en su situación de conflicto por el poderío lingüístico que les dirija a otras metas de poder y expansión, van arrimando a las lenguas autóctonas, indígenas, las del pueblo.

Algunos de los cien mitos y prejuicios malintencionados que JCMC recoge en su libro son:

-La diversidad lingüística es un castigo divino, estipulado en el Antiguo Testamento: La Torre de Babel.

-Hay lenguas más avanzadas o evolucionadas que otras.

-Hay lenguas de cultura y otras que no lo son.

-A una lengua le corresponde siempre una nación.

-La multiplicidad de lenguas es un obstáculo para el desarrollo de la humanidad.

-La lengua estándar es mejor y más perfecta que otras variedades.

-Hay lenguas fáciles y difíciles.

-Hay lenguas imposibles de aprender.


Está claro que estos prejuicios no son más que producto de la ignorancia y el aprovechamiento de dicha ignorancia por ciertos medios para desprestigiar a las lenguas minoritarias, arrinconándolas al abandono, a su extinción.

En este libro, Moreno Cabrera reafirma que más que ayer los lingüistas de hoy estamos obligados a asumir nuestro compromiso de defensa del patrimonio lingüístico tan exquisitamente diverso y tan abrumadoramente amenazado hoy en día por quienes ven en ese abandono y en las supuestas "desigualdades e inferioridades" la oportunidad para violentar los derechos lingüísticos y humanos de las comunidades discriminadas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me interesa muchísimo este libro, gracias por comentar sobre él. Espero leerlo pronto y pasaré por aquí para seguir comentando.

Una sociolingüísta más.

Luisa Tejada dijo...

Hola sociolingüista!!! De verdad que el libro está muy bueno, a mi me gustó mucho.

Gracias por tu comentario, y espero que sigamos compartiendo opiniones.

Saludos!!

Luisa

Anónimo dijo...

Yo también he leído ese libro y realmente es muy bueno. Creo que se tendrian que difundir esas ideas a la pobrlación, sobretodo en el estado donde vivimos y dejarnos ya de tonterias que si el catalán, que si el español..... NO HAY UNA LENGUA SUPERIOR A OTRA, simplemente lo vemos así por qüestiones puramente políticas y económicas....

Saludos a las dos!!

Xavier dijo...

Gracias por postear una entrada referenciando este esclarecedor libro de Moreno Cabrera. Ciertamente, creo que deberíamos pensar siempre a lo grande, como seres humanos que somos. El ser humano , com tal, es diverso y por tanto distintas sus formas de expresarse. Así, creo que cuantas más lenguas se sepa, o por lo menos cuanto antes respetemos la igualdad entre ellas (desde un punto de vista lingüístico es inapelable esta afirmación), más abiertos nos volveremos, más culturas conoceremos y, en fin, seremos más humanos, conoceremos muchísimo mejor nuestra especie, que como digo, es única y variada. Los problemas solo empiezan cuando se intentan instrumentalizar los códigos lingüísticos envirtud de , como ya se ha dicho y bien sabéis, unos fines políticos o partidistas y económicos.