martes, 12 de mayo de 2009

Mujer y lenguaje en el periodismo en español

M. Camps, Violeta Demonte, Susana Guerrero, A. Gómez Font.



Esther Forgas Y M. Lagunilla.


El IV Seminario Internacional de Lenguaje y Periodismo, organizado por la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) y La Fundación San Millán de la Cogolla, se realizó los días 6, 7 y 8 de mayo en San Millán de la Cogolla, La Rioja.

Bajo el título de "Mujer y lenguaje en el periodismo en español", periodistas y lingüistas se dieron encuentro en una serie de mesas redondas, en las que se debatieron, entre otras cosas, aspectos relacionados con el lenguaje sexista empleado en los medios de comunicación y sobre la responsabilidad social que estos tienen en el tratamiento de la mujer.

"La visión lingüística afirma que hay maneras de tratar la información que pueden evitar el sexismo y que es necesario que los medios las utilicen para que el público las asuma" (Fundéu).

Como representantes de la Lingüística, estuvieron Violeta Demonte, Marina Fernández Lagunilla, Eulalia LLedó, Esther Forgas, Ana María Vigara, entre otros.

El Seminario recogía un tema, en mi opinión, bastante polémico, puesto que no tod@s tenemos la misma visión, en principio.

Por un lado l@s linguistas consideramos que el cambio es inevitable, que el lenguaje se debe adaptar a la realidad, a la necesidad del hablante, que el lenguaje es por ende una realidad cambiante... y que cualquier cambio es bienvenido siempre y cuando no atente contra las leyes gramaticales de la lengua.

Por otro lado, l@s periodistas son usuarios y a la vez se sirven del lenguaje para comunicar, de la mejor manera posible, atendiendo a fines en casos comerciales o publicitarios, en los que vale más captar la atención del receptor que el mismo contenido. Como que las formas y los medios justifican el fin.

El tema se abría debate entre la búsqueda del consenso y la sensibilidad social respecto a cederle a la mujer el lugar que se merece, de acuerdo a estos tiempos, en los que su presencia es innegablemente visible.

Y siendo el lenguaje una entidad social, no debe rehuir a las nuevas realidades ni a los nuevos tiempos, en ninguna de sus realizaciones.

Apartado. Fue muy gratificante para mí estar en este Seminario, en donde conocí a personas que destacan por su notable calidad humana y profesional.
No imaginé compartir luego una visita a una bodega y entre vinos y botellas estar con Marina F. Lagunilla, a quien leí en Sintaxis y Cognición, ni imaginé conversar con Violeta Demonte, autora de varios textos de teoría sintáctica. Ambas me parecieron, como dicen en estos lares, muy "majas".